Gonartrosis de grado 1
- Pérdida incipiente de cartílago
- Engrosamiento del hueso por debajo del cartílago
- No hay estrechamiento de la cavidad articular
Gonartrosis (artrosis de la articulación de la rodilla)
¿Qué es la gonartrosis?
La palabra gonartrosis está formada por gonato (término griego para rodilla) y el término artrosis. Se trata de un desgaste progresivo de la articulación de la rodilla. Esto provoca desgarros y la reducción del cartílago articular y, posteriormente, el desgaste de las estructuras articulares vecinas, como los huesos, los ligamentos y la cápsula articular.
La gonartrosis, o artritis de rodilla, es una de las enfermedades más comunes de la articulación de la rodilla. Dado que es una enfermedad progresiva y que la capacidad regenerativa disminuye a lo largo de la vida, la proporción de personas afectadas aumenta con la edad. En total, hay 5 millones de personas afectadas en Alemania, de las cuales unos 2 millones sufren dolor. El número de casos es especialmente elevado entre los mayores de sesenta años, siendo las mujeres de este grupo de edad las más frecuentemente afectadas.
Las consecuencias del desgaste y la destrucción del cartílago articular son dolor, rigidez matutina, movilidad limitada e inestabilidad de la rodilla. Cuanto antes se detecte el inicio de la artrosis, más eficazmente podrá contrarrestarse. Quienes ya toman medidas preventivas pueden evitar daños en el cartílago mediante ejercicios específicos.
En caso de dolor persistente en la rodilla, sin duda debe buscar asesoramiento médico para iniciar el tratamiento lo antes posible.
Localización del dolor
- Si están afectadas las tres secciones articulares de la rodilla, se trata de una pangonartrosis.
- Si sólo está afectada principalmente la articulación patelar (articulación femoropatelar), se denomina artrosis retropatelar.
- Si los signos de desgaste se producen principalmente en la parte externa, se denomina gonartrosis lateral. Si además existe una deformidad en x de la pierna, se trata de gonartrosis valga.
- Se habla de gonartrosis medial cuando la artrosis se limita al lado de la articulación que mira hacia el centro del cuerpo. En combinación con una mala alineación de la pierna arqueada, se denomina gonartrosis varo.
Causas de la gonartrosis
Aunque el daño del cartílago articular hialino se produce principalmente como signo de desgaste relacionado con la edad, existen otras causas que pueden provocar la artrosis o favorecer su progresión. A menudo se produce una interacción de diferentes factores.
- Lesiones
Las lesiones de rodilla, como una rotura del ligamento cruzado, un menisco dañado o una fractura de rótula, también pueden afectar al cartílago articular. Las fracturas del muslo o la parte inferior de la pierna, pueden tener un efecto negativo debido a la carga incorrecta.
- Infecciones e inflamaciones articulares
Las infecciones articulares causadas por bacterias, pero también las inflamaciones crónicas (por ejemplo, la artritis reumatoide) pueden atacar las estructuras y provocar daños articulares.
- Malformaciones
Las deformidades congénitas, como las rodillas valgas o las piernas arqueadas, pueden provocar un aumento de la carga unilateral y el desgaste de la articulación.
- Sobrecarga
Las actividades físicas que implican mucho trabajo en las rodillas o mucho esfuerzo pueden favorecer la aparición de gonartrosis.
- Sobrepeso
La obesidad también es un factor de riesgo y puede favorecer el desarrollo y la progresión de la gonartrosis.
- Trastornos metabólicos
La gota es una enfermedad metabólica en la que aumenta la concentración de ácido úrico en la sangre y, en consecuencia, se depositan cristales de ácido úrico en las articulaciones. A su vez, una alteración del metabolismo de las grasas también puede provocar obesidad.
- Componente neurológico
La falta de movimiento o la alteración de los patrones de movimiento, por ejemplo tras enfermedades del sistema nervioso como la poliomielitis, la parálisis tras un derrame cerebral o la rotura del ligamento cruzado, pueden provocar el desarrollo de gonartrosis.
Signos y síntomas típicos de la gonartrosis
- Dolor de inicio tras largos periodos de reposo
- Dolor al subir escaleras y al caminar por terrenos irregulares
- Dolor de esfuerzo después de realizar grandes esfuerzos o al transportar objetos pesados
- Dolor tras permanecer mucho tiempo sentado
- Aumento de los síntomas con tiempo frío y húmedo
- En fases avanzadas, también ruidos de crujidos y crujidos al moverse (crepitación)
Etapas de la gonartrosis
Existen diferentes métodos para clasificar la gonartrosis por grados de gravedad. La siguiente lista se basa en el baremo de Kellgren-Lawrence, que utiliza una radiografía convencional para determinar la afección.
Una rodilla normal y sana, sin deterioro ni dolor, se clasifica como gonartrosis de grado cero.
Gonartrosis de grado 2
- Estrechamiento perceptible de la cavidad articular
- Posibles irregularidades de las superficies articulares
- Comienzo de la osificación (ligera formación de hueso nuevo)
Gonartrosis de grado 3
- Estrechamiento avanzado de la cavidad articular
- Formación significativa de hueso nuevo
Gonartrosis de grado 4
- Defectos importantes del cartílago
- Cavidad articular parcialmente completamente eliminada
- Formación de quistes y esclerosis en el hueso
- Muerte del tejido
¿Cómo se diagnostica la gonartrosis?
El diagnóstico de la gonartrosis se basa en varios pilares. Tras aclarar los síntomas en la entrevista de anamnesis con el*la paciente, se comprueba la movilidad. Para localizar el dolor con mayor precisión, se palpa la rodilla. Si se sospecha una artrosis de rodilla, se puede realizar una radiografía u otros procedimientos de diagnóstico por imagen (por ejemplo, resonancia magnética) para determinar si la articulación ya está dañada y en qué medida.
Tratamiento de la gonartrosis
Dado que el desgaste del cartílago articular es degenerativo, la enfermedad no puede curarse de forma causal. Por lo tanto, el objetivo de la terapia es aliviar el dolor, mantener la movilidad de la rodilla y frenar la progresión de la artrosis.
Además de la terapia conservadora, también puede realizarse una intervención quirúrgica para preservar la articulación. En estadios muy avanzados de gonartrosis, también puede ser necesario el uso de una articulación artificial como último recurso.
Tratamiento integral de la gonartrosis
Como enfoque holístico, la terapia conservadora combina varias opciones, desde el uso de elementos de apoyo para descargar la presión, fisioterapia y nutrición saludable hasta el tratamiento farmacológico con AINE, hialurón y analgésicos.
Dispositivos de apoyo
JuzoFlex Genu Xtra sujeta y descarga la articulación de la rodilla. Además, el efecto de compresión del vendaje de rodilla alivia el dolor causado por el movimiento. Esto es importante porque la movilización suave es un factor importante en el proceso de curación. Esto se debe a que el movimiento favorece la circulación sanguínea en la articulación de la rodilla y, por lo tanto, el suministro de nutrientes al cartílago articular que se ve afectado en la gonartrosis. Este efecto positivo se ve reforzado por el suave efecto de masaje de los nódulos de fricción del anillo patelar al mejorar la propiocepción. El anillo patelar también garantiza el masaje del líquido inflamatorio del tejido que rodea la rótula.
La carga estática incorrecta puede compensarse con plantillas ortopédicas.
Ergo y fisioterapia
La terapia de movimiento ideal para la gonartrosis es un programa de ejercicios de etapas adaptado individualmente que no solo fomente la resistencia y la fuerza, sino también la movilidad. Las corrientes TENS, las ondas de choque, las microondas, las ondas cortas y las ondas sonoras de impulsos también pueden utilizarse con éxito en el tratamiento.
Termoterapia
Para el dolor crónico de la artrosis, pueden utilizarse almohadillas térmicas y baños calientes. En cambio, los síntomas agudos suelen aliviarse más con aplicación de frío como compresas de hielo.
Movimiento
Los pacientes no deben sobrecargar la articulación afectada. No obstante, deben moverla regularmente para garantizar un aporte suficiente de nutrientes al cartílago articular.
Alimentación
Una dieta antiinflamatoria alivia la artrosis. Los ácidos grasos omega-3, que se encuentran entre otros en el aceite de linaza, el salmón y el arenque, tienen un efecto positivo. Los productos cárnicos y otros alimentos de origen animal contienen ácido araquidónico, a partir del cual pueden formarse sustancias mensajeras proinflamatorias. Por lo tanto, se aconseja reducir la ingesta de estos alimentos.Una mezcla de especias de comino, cilantro y nuez moscada mejora el flujo sanguíneo a la mucosa articular y alivia así el dolor. Una alimentación a base de plantas aporta al organismo vitaminas, minerales y sustancias vegetales secundarias. El silicio, que se encuentra en la avena, el arroz integral, la cebada, el mijo y el topinambo, ejerce un efecto estabilizador del cartílago. Uno de los efectos secundarios positivos de una dieta sana es una reducción de peso y, por tanto, una descarga adicional de las articulaciones.
Medicina tradicional china (MTC)
En los últimos años, la acupuntura se ha utilizado cada vez más en la gonartrosis para aliviar el dolor y mejorar la función articular.
Medicamentos
Para el dolor agudo, se pueden recetar pomadas y analgésicos. Otra opción de un plan de tratamiento holístico de la artrosis son las inyecciones de ácido hialurónico o componentes sanguíneos autólogos (plasma rico en plaquetas: PRP) en la articulación de la rodilla.
Especialmente si hay inflamación adicional, también pueden utilizarse inyecciones de cortisona.
Ejercicios para unas rodillas fuertes y sanas
Para fortalecer las piernas y, por tanto, las rodillas o para contribuir a la rehabilitación después de una lesión, hemos preparado algunos ejercicios para usted. Puede realizarlos fácilmente y lo ideal es que los incorpore a diario en su rutina. Si tiene una lesión grave, consulte a su médico. Él le dirá qué ejercicios son adecuados para usted.
Estiramientos
Repita el ejercicio de estiramiento dos veces en cada lado de la pierna.
- Póngase de pie sobre una pierna. La rodilla de la pierna sobre la que se apoya está ligeramente flexionada.
- Coja el pie de la otra pierna y llévelo hacia atrás hacia los glúteos.
- Sujete el pie con las manos.
- Mantenga esta posición durante unos 20 segundos y luego cambie de pierna.
Tenga en cuenta:
durante este ejercicio, la espalda debe permanecer recta.
Fortalecimiento - Zancada
Haga 12 zancadas y repita la serie tres veces.
- Póngase de pie con las piernas separadas a la anchura de la cadera y mantenga la parte superior del cuerpo erguida.
- Tense los músculos abdominales.
- Dé un paso amplio hacia adelante con una pierna.
- La parte inferior y superior de los muslos de la pierna adelantada forman un ángulo recto.
- La pierna trasera baja y se detiene justo antes de tocar el suelo.
- Mantenga la posición brevemente y vuelva a la posición inicial.
- Después de cada zancada, cambie de pierna.
Tenga en cuenta:
durante este ejercicio, la espalda debe permanecer recta.
Fortalecimiento - Sentadilla
Haga 12 sentadillas y repita este ejercicio de fortalecimiento tres veces.
- Colóquese en posición vertical, con las piernas un poco más abiertas que el ancho de las caderas.
- Apoye el mismo peso en ambas piernas.
- Flexione las piernas ligeramente mientras empuja los glúteos hacia atrás.
- Baje sólo hasta que las rodillas queden detrás de las puntas de los pies.
- Mantenga esta posición brevemente y vuelva a enderezar el cuerpo.
Tenga en cuenta:
durante este ejercicio de fortalecimiento, debe mantenerse recta la espalda y tensar los músculos abdominales.
